Pastoral Universitaria Mar del Plata
Oración comunitaria con docentes Corpus Christi
24 de junio de 2011
introducción
Nos encontramos hoy en la Casa del Señor para ofrecerle a Él nuestro trabajo de este año y acompañarnos, como hermanos, en nuestra tarea común. Ponemos en sus manos amorosas nuestros proyectos, nuestros temores, nuestras inquietudes, nuestras equivocaciones, nuestra voluntad de servir. Con confianza ilimitada nos abandonamos en Él y descansamos en Él.
lectio divina
Nos ponemos en presencia del Señor.
Invocamos la presencia del Espíritu Santo para que nos guíe en la oración comunitaria..
Caminar en el Espíritu
Espíritu Santo,
eres viento:
llévame donde quieras;
eres brisa:
déjame respirar lo nuevo;
eres fuerza:
levántame del suelo;
eres vida:
dame pasión por la vida;
eres alimento:
nútreme de tu savia;
eres luz:
ilumíname con tus rayos;
eres calor:
calienta mi existencia;
eres libertad:
hazme libre;
eres fecundidad:
cúbreme con tu sombra;
eres agua viva:
dame de beber;
eres respuesta:
dame fuerza para decir sí
al Padre,
al Hijo
y a ti, Espíritu Santo.
Domingo 26 de Junio de 2011 Corpus Christi Ciclo A
TEXTO BÍBLICO: Juan 6, 51-58
El que cree en mí es como si comiera pan del cielo, y nunca estará separado
de Dios. Yo he bajado del cielo, y puedo hacer que todos tengan vida eterna. Yo
moriré para dar esa vida a los que creen en mí. Por eso les digo que mi cuerpo es ese
pan que da vida; el que lo coma tendrá vida eterna.»
Los judíos empezaron a discutir entre ellos, y se preguntaban: « ¿Cómo puede
este darnos a comer su propio cuerpo?»
Jesús les dijo:
«Yo soy el Hijo del hombre, y les aseguro que, si ustedes no comen mi cuerpo ni
beben mi sangre, no tendrán vida eterna.
El que come mi cuerpo y bebe mi sangre,
tendrá vida eterna. Cuando llegue el fin del mundo, yo lo resucitaré.
Mi cuerpo es
la comida verdadera, y mi sangre es la bebida verdadera.
El que come mi cuerpo y
bebe mi sangre, vive unido a mí y yo vivo unido a él.
»Mi Padre, el Dios de la vida, fue el que me envió y me dio vida, pues tiene
poder para darla. Por eso, todo el que coma mi cuerpo tendrá vida eterna.
Yo soy el
pan que bajó del cielo, y el que cree en mí tendrá vida eterna. Yo no soy como el pan
que comieron sus antepasados, que murieron a pesar de haberlo comido.»
TRADUCCION EN LENGUAJE ACTUAL
1 - LECTURA
¿Qué dice el texto?
¿Cuales son los personajes que intervienen?
¿Donde transcurre la lectura?
¿En que momento del año sucede?
¿En que momento del día sucede?
¿Es un relato real o una parábola?
Preguntas para la lectura
• ¿Qué actitud pide Jesús a los demás?
• ¿qué sucede con los que creen en Jesús?
• ¿Cómo se autodenomina Jesús?
• ¿Qué dudas tenían los judíos que lo escuchaban?
• ¿Qué diferencia hay entre la vida humana terrenal y la vida eterna?
• ¿Qué pasa con los que comen del cuerpo de Cristo?
• ¿Qué pasará llegado el fin del mundo a los que han comido el Cuerpo de Cristo?
• ¿Qué sucede con los que creen en Jesús, como el enviado del Padre para salvarnos?
TRAER EL TEXTO A MI VIDA COTIDIANA
2 - MEDITACIÓN
¿Qué me dice el texto? ¿Qué nos dice?
(preguntas para la meditación)
• Si Jesús comienza y termina este texto sobre el creer, mi primer cuestionamiento es:
¿Dónde está mi fe? ¿dónde pongo mi fe?
• ¿Creo verdaderamente en Jesús? ¿Cómo lo manifiesto? ¿Cómo lo manifiesto en mi lugar de trabajo, en la universidad?
• Señor, ¿Comprendo la importancia de comer de tu cuerpo y beber de tu sangre?
• Eres Tú Señor el alimento que nutre mi alma y espíritu. ¿entiendo esto en mi vida?
¿lo valoro? ¿Transmito este alimento en forma de enseñanza verdadera?
• ¿Me acerco con frecuencia a consumir de tu cuerpo y de tu sangre? o ¿desaprovecho
ese maravilloso regalo que me has hecho?
• ¿Creo que eres tú Señor el que está presente en el pan y el vino consagrados?
• ¿Es realmente importante para mí permanecer unido a ti? ¿dejo que tú entres en mí
como tú quieras?
• ¿Testifico con mi vida que tú estás en mí? ¿Comparto mi vida espiritual con mis colegas y alumnos?
• Eres el único alimento que necesito para estar bien. ¿Te prefiero a Ti, antes que otras
cosas?
• ¿Permanezco unido a ti? O en cambio ¿me alejo de tu presencia?
3 - ORACIÓN
¿Qué le digo? ¿Qué le respondemos?
(respuesta grupal o personal)
La oración es la respuesta que le damos a Dios que se nos manifiesta primero.
Jesús no es fácil para mí comprender que quieras darme tu cuerpo como alimento,
¿Cómo es que puedo comerte Dios mío?, Solo el amor comete semejantes locuras.
¡Que triste me siento por las veces que he dejado de recibirte, pudiendo haberlo
hecho! Y por las veces que te he recibido sin ponerte la debida atención.
Reconozco que en cada comunión te haces carne en mí y me pides que sea tu cuerpo
y que actúe en tu nombre entre las personas que me rodean. Mi enseñanza es como el pan que alimenta la inteligencia y el conocimiento de otros, hazla digna de tu Pan. Tú me identificas contigo.
¡Gracias por este honor!, ¡Ayúdame a responderte con todo mi corazón!
Señor, creo pero aumenta mi fe. Necesito tener una fe más firme y testificarte ante
los demás, ¡Jesús, yo creo que Tú eres el enviado del Padre para salvarnos! ¡Aumenta mi fe!
4 - CONTEMPLACIÓN
¿Cómo interiorizo el mensaje? ¿Cómo interiorizamos el mensaje?
Al llegar a esta parte de esta Lectio Divina ha llegado la hora de entrar más en la
intimidad con Dios y para esto te proponemos interiorizar y repetir en silencio varias veces
algunos estribillos del Salmo 63 (62):
Tu amor vale más que la vida
Dios mío, tú eres mi Dios.
Con ansias te busco
desde que amanece,
como quien busca una fuente
en el más ardiente desierto.
¡Quiero verte en tu santuario,
y contemplar tu poder y tu grandeza!
Más que vivir,
prefiero que me ames.
Te alabaré con mis labios.
¡Mientras viva te alabaré!
¡Alzaré mis manos para alabarte!
¡Con mis labios te alabaré
y daré gritos de alegría!
¡Eso me dejará más satisfecho
que la comida más deliciosa!
Me acuesto y me acuerdo de ti;
durante toda la noche
estás en mi pensamiento.
¡Tú eres quien me ayuda!
¡Soy feliz bajo tu protección!
¡A ti me entrego por completo,
porque tu gran poder es mi apoyo!
5 - ACCIÓN
¿A qué me comprometo como docente? ¿A qué nos comprometemos como mensajeros del Señor en la universidad?
Propuestas personales
• Realiza un análisis en tu propia vida y pregúntate ¿cómo está tu fe? ¿Por dónde está
tu fe? ¿qué tanta fe tienes en Jesús y que tanta fe tienes en las cosas de este mundo?
Haciendo un análisis de conciencia sobre la fe, prepárate con la reconciliación,
pidiendo perdón por las faltas de fe y llega comulgar con el Señor.
Texto original: Proyecto Lectionautas
CELAM/CEBIPAL-SEJ – SOCIEDADES BIBLICAS UNIDAS
Hno. Ricardo Grzona, frp - Hno. José Antonio Chavarría, frp